Para todos adquirir una vivienda propia es una prioridad, desde que comenzamos a generar ingresos y queremos gozar de independencia así que comprar una casa es una meta, nos dará el cobijo indispensable, además resguardará nuestras pertenencias y seguramente querremos disfrutar de una vivienda sumamente segura.

Sin embargo, todo no concluye cuando compramos la vivienda, ya que luego debemos evaluar qué tan segura es y cómo podemos optimizar la protección de cada uno de sus espacios.

Cabe destacar que muchos profesionales indican que la sensación de seguridad y confianza dentro del inmueble logramos obtenerla a través de diferentes dispositivos de seguridad, ya sea desde puertas blindadas, alarmas o cerraduras de seguridad.

Expertos que han trabajado con esta marca de cerraduras, señalan que los niveles de protección deben ser totalmente cubiertos, especialmente en la actualidad que muchas personas se sienten amenazadas por los delincuentes que a diario perfeccionan su técnica de robo, vulnerando así nuestra tranquilidad y la de nuestros seres queridos.

Cada vivienda requiere de cierto nivel de seguridad, por lo que existen diferentes dispositivos enfocados en responder a las necesidades de los clientes más exigentes.

¿Cuáles serían los niveles de riesgo de las viviendas?

Las necesidades de los clientes de los que hablamos en el punto anterior tienen estrecha relación con el grado de riesgo del inmueble, estos giran en torno a las posibilidades de robo que existen en el lugar de la casa, pero, todos estos riesgos disminuyen una vez que instalen diferentes dispositivos de seguridad.

Asimismo, una vez evaluamos el entorno y las probabilidades de robo, podemos buscar la asesoría de un cerrajero profesional, para seleccionar los mecanismos de protección para nuestra vivienda, es por ello que en los puntos siguientes haremos una breve descripción de los niveles de riesgo de las propiedades.

Riesgo bajo

Generalmente son casas que pertenecen a la clase media o a urbanizaciones donde vive una extensa variedad de habitantes, y este tipo de viviendas son habitadas durante todo el año, la mayoría de ladrones profesionales no invierte su tiempo en robar este tipo de inmuebles, dado a que existe el peligro de ser descubiertos.

Además, la mayoría de los artículos de una casa de clase media no son tan atractivos para los ladrones, sin embargo, si existen delincuentes que no desaprovechan ninguna oportunidad y si ven una vivienda con pocos dispositivos de seguridad seguramente ingresarán.

Riesgo Medio

Estas viviendas se encuentran en riesgo medio porque están ubicadas en lugares que no tienen muchos habitantes o vecinos y generalmente los propietarios no están de forma continua en el inmueble, por lo tanto ante mayor ausencia de los propietarios mayor será el tiempo del ladrón de entrar al hogar.

Estas viviendas son atacadas generalmente con herramientas eléctricas como el taladro o la extracción del cilindro, es por ello que en este tipo de viviendas se recomienda la instalación de puertas acorazadas o cilindros de seguridad adicionales.

Riesgo Alto

Este tipo de viviendas son las de clase media-alta, en estas residencias no se toman en cuenta la cantidad de vecinos que hay en el entorno y sus propietarios solo van en algunas temporadas y es que los ladrones en estos casos son aún más profesionales y generalmente forman parte de bandas criminales.

Por consiguiente se recomienda la instalación de puertas acorazadas y cerraduras multipunto, ambos mecanismo son perfectos para frenar ataques por parte de delincuentes expertos.

Finalmente, para aumentar el nivel de seguridad de tu vivienda solo necesitas una asesoría idónea y el presupuesto suficiente para adquirir los mejores mecanismos de seguridad, dependiendo de los niveles de riesgo necesitarás dispositivos de seguridad de menor o mayor resistencia.